La coordinadora provincial de Izquierda Unida –Mamen Barranco- señala que la puesta en marcha del tranvía de Jaén constituye el principal instrumento en el modelo de movilidad por el que IU va a apostar en su programa electoral de cara a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. Para Barranco no tiene justificación política lo que viene ocurriendo con la puesta en funcionamiento del tranvía de Jaén desde hace más de una década, cuando se puso en marcha, con carácter de pruebas, en el mes de mayo de 2011 y un juez suspendió su funcionamiento a raíz de una denuncia de la empresa Castillo, concesionaria entonces del servicio de transporte urbano de la capital, constituyendo este uno de los más lamentables legados que la empresa dejó a la ciudadanía de Jaén.
Barranco considera una falta de respeto para los vecinos y vecinas de Jaén el nuevo y enésimo retraso que va a sufrir la puesta en servicio del tranvía tras el anuncio de la consejera de Fomento –Marifrán Carazo- en el que se desdice de su promesa de que el tranvía de Jaén estaría en funcionamiento en 2023. En este sentido, la coordinadora provincial de IU afirma que el Grupo Parlamentario Por Andalucía presentará, a través de su portavoz, Inma Nieto, una nueva iniciativa parlamentaria sobre este tema.
Por su parte, Alberto Castro, miembro de la dirección local de IU en Jaén, señala que desde su formación política se tiene claro que hablar de movilidad sostenible en Jaén es hablar de la puesta en funcionamiento del tranvía, que no se debe entender como un instrumento aislado o circunscrito a la ciudad de Jaén, sino como un elemento integrado en un modelo de movilidad distinto y alternativo, que pasa por la interconexión del Área Metropolitana de Jaén a través de los servicios ferroviarios de cercanías, única alternativa de futuro desde el punto de vista de la sostenibilidad medioambiental. Para Alberto Castro, parece claro que el PP no tiene intención de poner en marcha el tranvía, que desde la Junta de Andalucía se está engañando a la ciudadanía de forma convulsiva, atrasando una y otra vez los plazos para realizar las licitaciones precisas para la puesta en servicio del tranvía, siguiendo la filosofía del anterior alcalde de Jaén –Fernández de Moya-, cuando afirmó que él no se subiría al tranvía.
Finalmente, Alberto Castro ha señalado que es un auténtico disparate que una inversión de 120 millones de euros continúe, año tras año, sin tener más rentabilidad social que la de servir de aparcamiento de vehículos, siendo posiblemente el aparcamiento más del mundo.